domingo, 12 de octubre de 2008

anecdotas de la abuela...

Tengo el privilegio de tener en mis manos unos pequeños comentarios que mi abuela Graciela Estigarribia hizo de la vida del Mariscal en el año 1970, ella ya estaba ciega, mi mamá tenía que hacer un trabajo para el Colegio (6to curso) y Grand Mamam (como le decimos todos sus nietos) empezó la historia de la siguiente manera:

"Un pensador y poeta llamado Sabat Scart decía del Paraguay "es el pais mediterráneo donde entre relámpagos y sangre, sus grandes figuras son trágicas", y comentando este pensamiento, otro poeta, Fernán Silva Valdez habla del recibimiento que su tierra ofreció a José Félix Estigarribia:

"Entre relámpagos y truenos surge un héroe de la guerra, paladín de la paz, la tragedia griega del Chaco no le impide soñar con la mejor de las victorias, una paz justa, y en la cima de la gloria tiende a su diestra al adversario de ayer".

Mucho se ha hablado de la polifacética personalidad de Estigarribia, la historia militar lo eleva entre los grandes capitanes de América, y un Filósofo Americano llamado David H. Zook Jr. (pueden ver mas información en este blog); lo incluye entre los grandes generales del mundo.

Como guerrero, marca con su victoria, el fin del pleito chaqueño, que pesaba sobre siglos en el Paraguay, obtiene un doble triunfo como militar y embajador, asegurando con el tratado definitivo de paz, una era de prosperidad para su tierra.

Nació el 21 de febrero de 1888, cuando los bolivianos avanzaban audazmente por el chaco, hasta cerca de Villa Hayes, murió el 7 de setiembre de 1940, asegurando las fronteras del norte con Bolivia y las del Pilcomayo en otro tratado con la Argentina.

En medio siglo obtuvo para su tierra el respeto internacional y en lo interno consiguó la unión de los paraguayos en defensa de su heredad y, podemos afirmar, de la supervivencia del Paraguay. No pueden calcularse las consecuencisa para nuestra patria si la guerra del Chaco no hubiese sido una sucesión de victorias. El pueblo entero bajo el mando del Mariscal José Félix Estiagarribia, rubricó el derecho del Paraguay sobre el legendario territorio chaqueño, treintamil vidas jóvenes fueron el precio de la gloria.

Estigarribia, así, sin títulos es en su esparatana grandeza, una figura subyugante. Desde su juventud, un estudiante ansioso de saber, formado por grandes maestros como Gondra, Cecilio Báez, Viriato Diaz Pérez, opta por la carrera de las armas, donde contaba con varios ascendientes muertos en el Holocausto de Cerro Corá. Se le atribuye al joven teniente haber dicho: "Respetemos nuestro pasado histórico, mas no lloremos tanto y pensemos alguna vez en la victoria".

Era a su regreso de Chile, cuando obtuvo la medalla de oro de su promoción y volvió, no solamente con su diploma, sino con cinco grandes cajones de libros humanísticos y cinco de tópicos militares.

Macedo Suárez, canciller de Brasil con quien hizo gran amistad en Europa, donde el brasileño comenzaba su carrera diplomática y nuestro héroe ingresaba en la Escuela Superior de Guerra, comentaba lo siguiente: "El joven rubio, modesto, callado, pero que tenía el raro don entre sudamericanos de imponer sin quererlo, sus modales refinados sorprendían a los franceses, su vasta cultura a los americanos y sus notas brillantes a sus entonces compañeros de armas".

De Europa regresó con el "Brevet dÉtat major" (Brevet de Estado Mayor) y habiendo recorrido los principales países europeos, trajo la certeza de que Bolivia se armaba para agredir al Paraguay.

2 comentarios:

Bado dos Santos dijo...

Muchas fuerza mi queridisima amiga Julia para con este interesantisimo material.
El Mariscal Estigarribia definitivamente es uno de los más magníficos militares que el mundo pudo conocer. La Batalla de Boquerón es un buen ejemplo. Seguí adelante, y envidia sana te tengo al no tener como abuelo al Gran Comandante!

Juliellen dijo...

mi querido edu, muchas gracias por tus palabras, se de tu profunda admiración a Estigarribia y pensando en que mucha gente podria llegar a conocerlo y quererlo como vos me anime a hacer este blog. Gracias por tus palabras!